Como bien titulo, hablé de hijos, de mis polluelos y del poemario publicado, hablé de amores, del AMOR, con letras mayúsculas; soñé y me dejé llevar por los ensueños para aterrizar una hora después.
Fue un viaje largo, intenso, me dejó completamente agotada.
A pesar de todo ya estoy lista para volver a sentir.